He tenido la suerte, amigos de la web, de disfrutar de una gran experiencia fotográfica. El mago santanderino Raúl Alegría visitaba el estudio de “Lavid Romano Fotógrafos”, en Santander, para hacer una sesión de la que nacerán las escenas publicitarias de sus próximos e importantes proyectos. Y allí pude estar. Ver en acción creativa a Nacho resulta una delicia. Es un fotógrafo extraordinario, lleno de sensibilidad y buen gusto. Me parece un humanista de la cámara, como lo fueron en su día mis admirados Doisneau y Brassaï, de quienes, por cierto, hablamos y vimos fotos en los descansos de la cita. Las fotografías son Arte -así, con intencionada mayúscula- cuando las realizan fotógrafos como él. Seguro que gracias a su talento y alma las próximas imágenes artísticas del ilusionista cántabro van a ser magníficas. A la espera de ellas os dejo con esta instantánea que capté en plena labor de Nacho, eficazmente ayudado por su esposa en las destacadas tareas de maquillaje, peinado, vestuario e iluminación. Nos presenta a Raúl muy concentrado y artista siguiendo con máxima atención las siempre acertadas indicaciones de este prestigioso profesional de la cámara. ¡Enhorabuena a los tres, amigos!