En su edición impresa publica hoy El Diario Montañés mi artículo titulado “Íñigo”, en el que rindo homenaje a un inolvidable profesional de la comunicación. José Mª Íñigo fue un maestro de la cámara y el micrófono. En el artículo subrayo diversos aspectos técnicos de su manera de trabajar, de los que deberían tomar buena nota, si quieren llegar a triunfar de verdad, las nuevas generaciones de profesionales tanto de la televisión como de la radio. José María indicó con claridad el camino a seguir en ambos territorios. Para comprobarlo solo hay que ver y escuchar cualquiera de sus programas. Las huellas de los grandes son siempre imperecederas.