La originalidad a la hora de plantear ideas y el acertado sentido crítico que muestran en sus trabajos confirman la sobresaliente calidad intelectual y formativa de la mayoría de alumnos que habitan las aulas de los colegios e institutos españoles. He aquí un ejemplo que encontré en una reciente visita profesional que he hecho al IES Agusto González de Linares, en Santander. Este tiburón cortado en dos partes, de cuyo interior salen diversos objetos de plástico, cuelga espectacularmente del hueco de la escalera interior principal del edificio. Lo han realizado los propios alumnos como referente-reflexión de uno de los grandes males de nuestro tiempo y del que tan poco se habla: la gravísima contaminación de los mares y cómo afecta a sus especies. Sin duda, se rinde así merecido homenaje a la admirable trayectoria del ilustre científico cántabro que da nombre al Instituto. Fotografié tan impresionante “ejemplar” para que todos los visitantes de la web podáis disfrutar de esta estupenda idea educativa. ¡Enhorabuena a sus inspirados autores!
