Olas como la de la imagen se estrellaban hoy por la mañana contra el muro recién recalzado de El Sardinero, al que tanto afecto el temporal de Febrero y cuyas huellas aún son visibles en superficie. Azotaban sobre todo, como se puede comprobar en la foto que hice, la rampa de bajada a la segunda playa. Y eso que hoy, por fortuna, no era día de temporal. Pues menos mal.