Esta imagen, destinada a tarjeta postal y realizada desde la azotea de uno de los edificios de Castelar (quizá el último, el más cercano a la popular “Cuesta del Gas”), nos muestra otra entrañable estampa de aquel Santander que fue. Se ve en ella un detalle muy típico de otros tiempos: las redes de los barcos de pesca que atracaban en Puertochico. Redes que cosían con manos maestras las “rederas”, inolvidable estampa que ya es también puro recuerdo. La foto -lástima no conocer el nombre de su autor para felicitarle por ella como se merece- permite contemplar, en conjunto, una magnífica perspectiva de la zona más tradicional de la capital cántabra. Podría pertenecer a la década de los sesenta.
