Tras casi medio siglo profesional, el 15 de julio será la despedida de su labor en el arte de crear la atmósfera de los libros. Ismael Casado de la Fuente y Carlos Basconcillos Gama se conocieron como compañeros asalariados y ya hace tres décadas que iniciaron la aventura empresarial. En la misma crecieron y tuvieron que cambiar de local. Su labor ha sido callada, pero han creado carpetas, ficheros, encuadernaciones en rústica cosido o fresado… Sus clientes admiramos su facilidad para personalizar los trabajos y conseguir llegar a entregar en la fecha requerida. Entre sus trabajos más difíciles recuerdan un expositor que les quitó el sueño, encargo del Real Madrid, y el cajón con libros de Santander en piel que construyeron para el Rey, regalo del Ayuntamiento. Sin desmerecer otros trabajos, como las pequeñas cajas de los concursos de cuentos infantiles de la Tertulia Goya al estilo de los Cuentos de Calleja. Su establecimiento de la Calle Francisco Cubría, su última sede, al igual que la anterior en Cisneros, han sido lugares de culto para las personas a las que les gusta tocar y oler los libros. Su labor permanecerá en estantes, librerías y bibliotecas testigo de un arte expresado también en letras doradas estampadas en los lomos y las tapas. Gracias por un trabajo consistente en envolver y poner en valor la belleza de los libros.
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TEXTO Y FOTO: Francisco Martín Medrano